El final de 2021 estuvo marcado por un importante aumento de los costes del mercado fotovoltaico, absorbido principalmente por las empresas integradoras, que realizan la venta e instalación directa de los sistemas. Comparando los precios medios FOB del módulo PERC en diciembre de 2020 y en diciembre de 2021, el incremento medio fue de alrededor del 26%, fuertemente influenciado por la crisis del mercado internacional. El precio de los kits fotovoltaicos, es decir, los sistemas completos que incluyen otros equipos, aumentó un 14% en el periodo.
Sin embargo, según la encuesta GD realizada a los integradores fotovoltaicos por Greener, el precio medio al consumidor final subió en Brasil un 8% entre enero de 2021 y enero de 2022. El aumento percibido por el consumidor se vio mitigado por la parte del precio final relacionada con los servicios de integración, que se redujo de media un 9%.
Los precios para el cliente final variaban, en enero de 2022, de R$ 3,83/Wp (unos US$ o,80), en el caso de sistemas de 5 MWp instalados en tejados, a R$ 6,35/Wp (unos US$ 1,33) en el caso de un sistema de 2 kWp instalado en tejados. Son los precios más altos registrados por la encuesta Greener en dos años. A pesar de ello, el sistema fotovoltaico residencial acumula una reducción del 33% en los últimos cinco años.
Aunque los kits fotovoltaicos (módulos, inversores, estructuras, cables y protecciones eléctricas) son el principal elemento de coste de un sistema, el aumento de los precios de los equipos se vio parcialmente mitigado por la parte de los servicios, jugando la cadena de integración un papel fundamental para mitigar impactos más significativos para el consumidor final.
Escenario en China
A finales de septiembre de 2021, China atravesó un periodo de crisis energética en el que aproximadamente dos tercios del país sufrieron racionamientos y recurrentes cortes de electricidad, lo que afectó directamente a la producción china. Así, debido a las restricciones de producción en China, el silicio metálico (materia prima del polisilicio), que es el principal componente de los módulos y representa una media del 60% del coste de fabricación, sufrió un aumento de precio superior al 200%.
Además, la crisis de China repercutió en el precio de los fletes internacionales, fuertemente influenciado por la escasez de contenedores y el desequilibrio entre la oferta y la demanda. Antes de la crisis, el flete representaba alrededor del 3% del precio CIF del módulo, pero con la crisis llegó al 16%. Además del flete, hay que tener en cuenta el impacto de la constante apreciación del dólar en el precio del módulo a Brasil.
Las importaciones se duplicaron con creces
A pesar del aumento de los precios, el volumen de las importaciones a Brasil se duplicó con respecto a 2020. En 2021 el país importó 9,7 GW en módulos fotovoltaicos, correspondientes al 5,6% de la demanda mundial, que fue de 172,6 GW. En 2020, se importaron 4,76 GW.
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