Entre generación centralizada y distribuida, la solar brasileña sumó otros 500 MW en enero

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La matriz eléctrica brasileña registró una expansión de 621,56 MW de centrales centralizadas en enero de 2024, según datos de la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel). Entraron en operación 18 parques eólicos (422,2 MW), seis plantas fotovoltaicas (198,12 MW) y dos pequeñas centrales hidroeléctricas (1,24 MW). En el mismo mes, según los datos divulgados por Aneel, se añadieron 438 MW de generación solar distribuida.

La previsión de Aneel es que hasta el final de 2024 se sumen 10,1 GW de centrales centralizadas, la segunda mayor expansión de la serie histórica, después de los 10,3 GW de potencia instalada en el Sistema Interconectado Nacional (SIN) en 2023.

De ese total, según la agencia, 4,9 GW deben provenir de la solar, seguidos por 3,8 GW de la eólica. También se espera que las fuentes de biomasa, fósiles e hidroeléctricas añadan 1,1 MW, 300 MW y 159 MW. Si se cumplen las previsiones, será el primer año en que las centrales solares centralizadas lideren la expansión, por delante de los parques eólicos.

En 2023, se conectaron 104 plantas solares, totalizando 4.070,9 MW, o el 39,4% del total instalado el año pasado. La fuente fue la segunda después de los parques eólicos, con 140 unidades que entraron en funcionamiento durante el año, totalizando 4,9 GW, o el 47,65% de la expansión de la matriz en 2023.

Incluyendo la generación distribuida, la Asociación Brasileña de Energía Solar Fotovoltaica (Absolar) prevé un total de 9,3 GW de energía solar hasta 2024.

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