Un informe de Rhodium Group y el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) mostró que el compromiso de Estados Unidos con una transición energética limpia sigue aumentando precipitadamente, con una inversión total en energía limpia, transporte limpio, electrificación de edificios y gestión del carbono que alcanzó los 213 mil millones de dólares en el último año (del 1 de julio de 2022 al 30 de junio de 2023).
Los 213.000 millones de dólares invertidos representan un salto del 37% con respecto a las inversiones en 2021/2022, que fueron de 155.000 millones de dólares. La inversión limpia sigue aumentando con fuerza cada año. En 2018/2019, las inversiones totales alcanzaron los 81.000 millones de dólares, y han subido cada año desde entonces.
La fabricación nacional de tecnologías de energía limpia se ha convertido en un foco cada vez mayor en los últimos años, y los ricos créditos fiscales e incentivos han servido como fuerza de atracción. Las inversiones en fabricación ascendieron a 39.000 millones de dólares en 2022/2023, más del doble de los 17.000 millones invertidos en el periodo del informe anterior.
En los últimos dos años, los anuncios combinados de inversión en energía limpia y fabricación de vehículos eléctricos ascendieron a 137.000 millones de dólares, un aumento de cinco veces con respecto a los dos años anteriores. Rhodium Group calcula que ya se han invertido 37.000 millones de dólares del total anunciado en los dos últimos años. En los tres últimos trimestres, las baterías y los vehículos de emisiones cero han representado el mayor segmento de inversiones reales en fabricación, seguidos de los anuncios de fabricación de energía solar.
“La inversión en producción y fabricación de energías limpias está aumentando. Los nuevos puestos de trabajo e ingresos están trayendo oportunidades y optimismo a las comunidades rurales de todo el país. Los centros de fabricación de Estados Unidos están compitiendo para satisfacer la nueva demanda de energía limpia con el anuncio de una nueva instalación nacional de fabricación eólica, solar o de almacenamiento cada cuatro días”, dijo Jason Grumet, director ejecutivo de American Clean Power (ACP).
En caso de que las instalaciones de fabricación anunciadas actualmente entren en funcionamiento, ACP estima un aumento de casi nueve veces en la producción de módulos solares y de más de quince veces en el almacenamiento de baterías a escala de red, junto con aumentos significativos en la producción de células solares, polisilicio, lingotes y obleas, así como componentes eólicos. El informe indica que si las instalaciones de fabricación previstas entran en funcionamiento, la producción estadounidense de módulos solares podría crecer hasta los 62 GW.
En cuanto a la producción de energía y las inversiones industriales en tecnologías limpias, el informe señala que en los dos últimos años se han anunciado más de 257.000 millones de dólares en nuevas inversiones. Esto representa un aumento del 75% con respecto a los dos años anteriores para la inversión en producción de energía limpia, captura o eliminación de dióxido de carbono y otras formas de descarbonización industrial.
Imagen: Rhodium Group / MIT
“La mayoría de estos anuncios se han centrado en las tecnologías complementarias de la energía solar fotovoltaica y el almacenamiento conectado a la red, mientras que la inversión anunciada en nuevos proyectos eólicos se redujo a la mitad durante el mismo período”, señala el informe.
Sólo se han producido 63.000 millones de dólares de los 257.000 millones anunciados, lo que el informe atribuye a los plazos relativamente largos de los grandes proyectos de generación de energía. La energía solar representó la mayor categoría de inversión en energía e industria en el segundo trimestre de 2023, atrayendo 8 620 millones de dólares. Le siguieron el almacenamiento, con 4.080 millones, y la energía eólica, con 2.030 millones.
La inversión minorista en energías limpias también va en aumento. Las empresas y los hogares estadounidenses invirtieron 113.000 millones de dólares el año pasado en vehículos de emisiones cero, bombas de calor y energía distribuida, como la solar en tejados y el almacenamiento de energía. El crecimiento más rápido de esta categoría fue el de los vehículos de emisiones cero (ZEV), que aumentó un 46% y alcanzó los 70.000 millones de dólares en inversión minorista.
“La compra e instalación de sistemas solares en tejados residenciales y comerciales, otras energías renovables distribuidas, pilas de combustible y almacenamiento en baterías también ha aumentado con fuerza, mientras que las instalaciones de bombas de calor se ralentizaron el año pasado tras cuatro años de crecimiento significativo”, señala el informe.
La base de datos del Grupo Rhodium y el MIT sobre inversiones en transición hacia energías limpias puede consultarse aquí.
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