Dos nuevos paneles IROSA ampliarán la capacidad de producción de energía de un complejo de microgravedad en la estación espacial.
La NASA ha descubierto que las células solares de perovskita probadas en el espacio presentan menos degradación que los dispositivos de referencia probados en la Tierra.
El satélite de la NASA/NOAA, que forma parte de la serie GOES-R, funcionó según lo previsto en su prueba terrestre, con lo que está un paso más cerca de su lanzamiento.
La misión comercial de reabastecimiento de SpaceX ha instalado en la Estación Espacial Internacional (EEI) dos paneles fotovoltaicos desplegables (iROSA), un tipo de panel fotovoltaico liviano y flexible diseñado por la NASA para ser implementado y utilizado en el espacio.
La NASA planea colocar un conjunto solar en un mástil alto para evitar el sombreado lunar y capturar luz ininterrumpida. Colgará un par de mantas de células fotovoltaicas de un brazo transversal horizontal apoyado en el mástil, anclado a una base de trípode desplegable.
La agencia estadounidense está a punto de monitorear con mayor precisión el nivel de irradiación solar que llega a la tierra con el lanzamiento de un instrumento para la estación espacial internacional.
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