Según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), se espera que en los próximos años las fuentes de energía bajas en carbono generen una cuota récord de la electricidad mundial. Pero a pesar del creciente impulso y de los recientes avances, los objetivos de energía limpia de Estados Unidos siguen estando a un brazo de distancia. La pregunta sigue siendo: ¿qué se necesita para alcanzar nuestros objetivos de energía limpia? La respuesta: combinar los proyectos de energías renovables con el almacenamiento de energía.
La Ley de Reducción de la Inflación (IRA) está llamada a impulsar el desarrollo de las energías renovables. La Administración de Información Energética de EE.UU. (EIA) prevé que los nuevos proyectos solares y eólicos que entren en funcionamiento este año representarán el 16% de la generación total en 2023, frente al 14% del año pasado.
Mientras el país avanza hacia un futuro energético más limpio y ecológico, es importante tener en cuenta que las energías renovables, como la eólica y la solar, no acabarán por sí solas con el hábito de los combustibles fósiles. Por ello, el almacenamiento de energía se perfila como una solución milagrosa para aumentar la utilización de los recursos renovables intermitentes y adquiere mayor importancia a medida que la generación eólica y solar satura los mercados.
Superar los retos de la intermitencia
El reto, por supuesto, es que las fuentes de energía renovables son fundamentalmente intermitentes, y su producción no está disponible de forma constante de la misma manera que lo está la generación a partir de combustibles fósiles. Pero el almacenamiento de energía puede ayudar a energías renovables como la eólica, la hidráulica y la solar, convirtiéndolas en fuentes de energía fiables y constantes. Al combinar las energías renovables con el almacenamiento, la red y los operadores de la red tienen más flexibilidad, ya que la energía renovable intermitente puede despacharse según la demanda.
Cuando se combinan, los proyectos de almacenamiento aumentan el valor global de los proyectos de energías renovables. Por ejemplo, cuando el almacenamiento de energía se combina con energía solar fotovoltaica, aumenta el valor medio de la energía solar vendida a la red. El almacenamiento de energía también puede desempeñar un papel en la gestión de las restricciones, reduciendo las pérdidas de energía y ayudando a reducir el riesgo de un proyecto en la fase de desarrollo. En lugar de reducir deliberadamente la energía para equilibrar la oferta y la demanda en tiempo real, la energía puede almacenarse y, de este modo, ofrecer a los propietarios y operadores de proyectos renovables una forma de mantener la rentabilidad del proyecto reduciendo o eliminando las restricciones.
Además, combinar el almacenamiento de energía con proyectos de energías renovables puede ahorrar costes de permisos, planificación y construcción -en comparación con el desarrollo de los proyectos por separado-, lo que resulta esencial para poner en marcha proyectos de energía limpia y, en última instancia, alcanzar los objetivos de energía limpia.
Aumentar la fiabilidad de la red
Aunque la naturaleza intermitente de las energías renovables podría poner en peligro la fiabilidad de la red, el almacenamiento de energía proporciona valiosos servicios a la red, como el soporte de tensión y la regulación de frecuencia, que son fundamentales para mantener una red segura y fiable.
El almacenamiento de energía es también una fuente de energía de reserva durante los cortes, que se han convertido en un problema cada vez mayor debido a la inestabilidad de la red y a los fenómenos climáticos extremos. Pensemos, por ejemplo, en la red eléctrica de Texas. Desde la profunda helada de 2021, que provocó cortes de electricidad a gran escala, la búsqueda de soluciones para contribuir a la estabilidad de la red durante fenómenos climáticos extremos sigue estando en primera línea de los debates. Durante los periodos de máxima demanda, el almacenamiento de energía puede ayudar a aumentar la fiabilidad de la red y aliviar la presión sobre las compañías eléctricas y los operadores del sistema.
Reducir los costes de la electricidad
Recientemente, debido al aumento de los precios y la demanda de combustible, los estadounidenses han experimentado subidas superiores a lo normal en los costes de la energía doméstica. De hecho, según las Perspectivas de los Combustibles de Invierno de la Administración de Información Energética de EE.UU., se espera que el gasto medio de los hogares estadounidenses en electricidad aumente un 10% a lo largo de este invierno.
Al depender únicamente del suministro de combustibles fósiles, las empresas de servicios públicos y los operadores de sistemas se enfrentan al reto de satisfacer los picos de demanda de forma rentable. Los precios de los combustibles fósiles son muy volátiles, sobre todo en momentos de gran demanda, como las olas de frío. En lugar de seguir dependiendo de este combustible altamente volátil y contaminante, la inversión en proyectos de energías renovables junto con el almacenamiento de energía hacen posible un suministro de electricidad más prudente desde el punto de vista medioambiental para satisfacer los picos de demanda de energía, al tiempo que se mantienen bajos los costes.
Además, la construcción de instalaciones de almacenamiento de energía puede evitar el coste de costosas obras de transmisión y distribución. Estas alternativas no cableadas, que cuentan con el apoyo de las empresas eléctricas y los reguladores de todo el país, pueden ayudar a evitar el gasto de millones de dólares en desarrollo y construcción. El almacenamiento es igual de capaz de satisfacer algunas horas de máxima demanda a un coste mucho menor para los consumidores de electricidad. Y cuando la construcción de instalaciones de transporte y distribución se sustituye por el desarrollo de instalaciones de almacenamiento, esos fondos de transporte y distribución pueden reasignarse a proyectos que ayuden a integrar aún más el desarrollo de proyectos de energías renovables.
La conclusión es que con el aumento de la adopción del almacenamiento de energía y las energías renovables surge una nueva industria con los beneficios de los segmentos de alta inversión: creación de empleo, innovaciones, tecnologías y mucho más. Pero antes, es importante señalar que el almacenamiento de energía, y no sólo los parques solares o eólicos, será fundamental para alcanzar los objetivos nacionales en materia de energías renovables.
*Jeff Perry es vicepresidente ejecutivo de Gestión de Activos de Agilitas Energy, promotora, constructora, propietaria y operadora integrada de energías renovables distribuidas y almacenamiento de energía en el noreste de Estados Unidos, con sede en la ciudad de Boston.
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Fácil. Consumir energía renovable (de la buena) cuando esta se produce (colchón hidráulico-nuclear) y de la “otra” en “horas no renovables”. ¿Hay mucha energía renovable puntual? “Fabricar” Hidrógeno, versus biocombustibles.