Un promotor fotovoltaico revela los resultados de un proyecto piloto agrovoltaico sobre la soja

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De pv magazine Francia

TSE inauguró el año pasado en Francia su primer demostrador agrovoltaico en cultivos de campo. El proyecto experimental está equipado con su “marquesina agrícola”, que es un gran toldo equipado con paneles solares giratorios fijados en cables a 5 metros por encima de los campos.

La explotación de cultivos de campo cultiva soja, trigo, centeno forrajero, cebada de invierno y colza, además de albergar 150 vacas. En los últimos 10 años se ha enfrentado a veranos muy calurosos y muy secos. TSE instaló el sistema fotovoltaico para aprovechar su sombra, así como el descenso de la evapotranspiración y la temperatura durante el verano. El sistema agrovoltaico produce 3,2 GWh de electricidad al año.

El promotor francés acaba de presentar los primeros resultados del proyecto. A principios de junio de 2022 se sembró soja en una superficie de 3 hectáreas. El terreno estaba cubierto por la cubierta fotovoltaica. Para el primer ensayo, se plantaron seis variedades diferentes de soja, que se cosecharon el 12 de octubre de 2022.

Los equipos observaron un crecimiento vegetativo sólido de la soja, con una floración, fertilización y maduración fisiológica normales. Las seis variedades ensayadas presentaron una diversidad de rendimientos: hasta un 25% de diferencia en el rendimiento bajo cubierta y un 19% en el campo testigo.

“A pesar de una fuerte heterogeneidad del medio y, en particular, del suelo, los datos obtenidos, en particular para la variedad Soprana, anuncian resultados extremadamente prometedores para futuras cosechas: ninguna diferencia significativa para el rendimiento global y el número de vainas de la soja fuera y bajo cubierta, con un peso de 1000 granos superior bajo cubierta”, declaró el TSE.

En cuanto a las temperaturas, la cubierta agrivoltaica proporcionó una mejor protección contra el estrés térmico durante la insolación: la temperatura máxima observada bajo la cubierta es 1,2 ºC inferior a la de la zona de control. El suelo bajo el sistema fotovoltaico se mantuvo más fresco y retuvo mejor la humedad: de media, las lecturas indican -3,5 ºC a una profundidad de 30 cm en el centro del sistema desde junio hasta mediados de agosto.

Además, se observó que el potencial hídrico era mayor bajo el dosel. En el momento de la floración y el inicio del llenado del grano, la soja de la zona de control sufría estrés hídrico, a diferencia de la soja bajo la cubierta fotovoltaica.

“Tras este episodio, pude observar daños en la zona de control, mientras que la soja plantada bajo los paneles estaba mejor protegida”, declaró el agricultor Sylvain Raison.

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